El Gobierno aprobó el viernes una reforma del Sistema Nacional de Salud con la que pretende ahorrar 2.400 millones en gasto farmacéutico al año. La medida obliga a los médicos a recetar siempre por principio activo y al farmacéutico a vender el medicamento más barato de una misma familia.
Javier G. Jorrín - Madrid - 20/08/2011
El real decreto ley que aprobó el viernes el Gobierno el Consejo de Ministros para asegurar el objetivo de reducción del déficit fiscal pretende ahorrar al Estado 2.400 millones de euros de las partidas dedicadas a sanidad, así como 167 millones en la aportación de los ciudadanos. Según el Gobierno, estas medidas irán destinadas a dotar de "calidad y sostenibilidad" al sistema. El decreto recoge las medidas aprobadas en el Consejo Interterritorial de Salud celebrado el pasado 21 de julio.
La principal novedad es que los médicos tendrán que recetar por principio activo en lugar de por su marca comercial, y posteriormente, las farmacias dispensarán el medicamento o producto sanitario más barato de la misma familia.
La nueva norma elimina el periodo de transición de dos años que tienen los medicamentos que rebajen su precio para equipararse al de referencia. Por su parte, los medicamentos sin genéricos que hayan superado los 10 años desde su registro y que no se hayan incorporado a los precios de referencia, tendrán una rebaja del 15%. El real decreto ley llama a la Agencia Española de Productos Sanitarios a adecuar, en el plazo de un año, el contenido de los envases de los medicamentos a la duración real de los tratamientos de acuerdo con la práctica clínica. Esta medida permitirá que los "botiquines de las casas no acaben llenos de medicamentos sin utilizar que pagan todos los ciudadanos con sus impuestos", subrayó el ministro de Fomento, José Blanco.
Finalmente, la reforma incluye ayudas para las farmacias ubicadas en núcleos pequeños de población o aislados deprimidas para que puedan incrementar su rentabilidad y sigan prestando a la población "un servicio esencial". Las compensaciones alcanzarán un máximo de 10.000 euros anuales (833 al mes) que se percibirán con la factura mensual.
Por su parte, la patronal de los farmacéuticos FEFE exigió al Estado que avale el cobro de la deuda contraída por las comunidades autónomas para garantizar la continuidad de muchas farmacias.
La principal novedad es que los médicos tendrán que recetar por principio activo en lugar de por su marca comercial, y posteriormente, las farmacias dispensarán el medicamento o producto sanitario más barato de la misma familia.
La nueva norma elimina el periodo de transición de dos años que tienen los medicamentos que rebajen su precio para equipararse al de referencia. Por su parte, los medicamentos sin genéricos que hayan superado los 10 años desde su registro y que no se hayan incorporado a los precios de referencia, tendrán una rebaja del 15%. El real decreto ley llama a la Agencia Española de Productos Sanitarios a adecuar, en el plazo de un año, el contenido de los envases de los medicamentos a la duración real de los tratamientos de acuerdo con la práctica clínica. Esta medida permitirá que los "botiquines de las casas no acaben llenos de medicamentos sin utilizar que pagan todos los ciudadanos con sus impuestos", subrayó el ministro de Fomento, José Blanco.
Finalmente, la reforma incluye ayudas para las farmacias ubicadas en núcleos pequeños de población o aislados deprimidas para que puedan incrementar su rentabilidad y sigan prestando a la población "un servicio esencial". Las compensaciones alcanzarán un máximo de 10.000 euros anuales (833 al mes) que se percibirán con la factura mensual.
Por su parte, la patronal de los farmacéuticos FEFE exigió al Estado que avale el cobro de la deuda contraída por las comunidades autónomas para garantizar la continuidad de muchas farmacias.
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